ÁRMAGA, GALERÍA DE ARTE…
18 AÑOS EXPONIENDO A LOS GRANDES ARTISTAS
Y CREATIVOS NACIONALES E INTERNACIONALES…
LA BELLEZA NO SE CANSA DE ESAS PAREDES,
NI DE LA VOCACIÓN DE ASUNCIÓN Y MARGA…
Por TOÑO MORALA
(Reportaje publicado en el periódico leonés La Nueva Crónica el lunes 6 de junio de 2016)
Hoy no vamos a escribir sobre ningún artista en especial, ni sobre una exposición determinada en tal o cual sitio: galería, museo, la calle… y miles de lugares donde se pueda colgar o exponer una obra de arte. Hoy, y si me lo permiten, vamos a escribir sobre el vientre, la cuna, la madre de lo artístico por excelencia; hablo de la galería de arte, y de una en particular: Ármaga, una de esas galerías de arte que se crearon hace ya un montón de años en esta ciudad de León tan bella y tan llena de ese encanto que el arte respira por todas sus calles y que comparte el que admira sin prisas y sin buscar nada a cambio. Una de esas galerías que acoge a un buen número de artistas tanto de la provincia como de afuera; y que en ese momento de respiro de la pared en blanco, se vuelve a llenar de esa complicidad entre el artista y la galería, esa amistad que perdura a lo largo del tiempo.
Pienso que es la gran obra de arte expuesta en la sonrisa, la mirada limpia del que sabe detrás de lo que anda en este mundo tan lleno de egocentrismos, vanidades y otros añadidos, y el corazón artístico por las dos partes. En ese juego creativo, tan inmensamente importante para el arte, y más en estos tiempos crudos que corren, la galería tiende a ser el gran soporte para que los artistas expongan su obra en ese espacio, y a la vez, puedan seguir comiendo de su inmenso trabajo. El artista está llamado a ser constantemente puesto en cuestión en cada momento histórico y en cada entorno cultural. El arte es sustituido por la visualidad en estado puro, y de esa belleza siempre inexacta, es donde perdura esa magia entre lo que se expone en la galería, el artista, y ese público lejano y silencioso; generalmente enamorado del arte hasta las trancas, y que va ahorrando de aquí y de allá para poder comprar esa mágica propuesta del artista. Y aquí el trabajo del galerista es donde más se nota; hay que ser muy consecuentes con el espacio, la luz, y hasta la música; hay que saber del artista casi todo; de lo contrario, el galerista no acierta a mostrar al público el alma de su protegido, el corazón de la obra en el más sutil de los encuentros. Debe de ser que uno cuando ve una obra de arte a primera vista, y sin escudriñar su interior, es cuando te llega el mensaje claro y sin confusión de lo que dice el artista, pero el vestido… lo exterior de esa obra, le toca de lleno al galerista.
Ármaga es el sueño hecho realidad de dos enamoradas del arte en todas las expresiones posibles; años de trabajo, de viajar, de mirar y admirar, de compartir silencios y tristezas. Años de educar al ojo para que la vista no les engañe y tampoco al artista; nadie nunca sabe el resultado final de una exposición en una galería de arte, nadie puede predecir la venta, ni el porqué, ni el cuándo; la sabiduría del galerista es la que cierra el compromiso entre la creación y la necesidad eufórica del que visita y que asoma su delicada presencia en la llamada de las paredes vestidas de la belleza suficiente para que el corazón empiece a latir más rápido, y el “swing” lo pone la galerista, se deja llevar por el instinto de la inmediatez para pasar luego a los pasos concisos y serenos del cierre de una cesión de arte. Una venta de arte no es comprar un sofá para el salón… una venta de arte es la que va a acompañar los sueños de su habitación, la pared encendida de un salón tenue de luz y color, ese pasillo amplio que se viste en las llegadas y salidas en los umbrales de la serena convivencia entre tu casa y el resto del mundo.
Pero volvamos al inicio de esta bella historia de las galeristas Marga Carnero y su tía Asunción Robles… que inició allá por los años 70 aquella galería de arte en un piso de Ordoño II; muchos aún la recuerdan. Sardón fue el inicio de esta saga de enamoradas del arte, pero todo lo comenzó su abuela Eutiquia, de San Miguel de Escalada, fallecida hace unos meses después de una larga vida llena de trabajo, cultura y arte, y la madre de Marga, Margarita Aurora, maestra y pintora, cuando por los años 60, no quedaba una exposición o una presentación de algún libro al que no acudieran… “Preparaos chicas que vamos a ver la exposición de Vela Zanetti”, o la presentación de algún libro de Pereira. El arte nunca se crea en el vacío. Es importante comprender las circunstancias históricas, culturales y sociales que hay detrás de la creación y del creador, y aquí el galerista sí que juega un papel muy importante; independientemente del cuidado exquisito de las ideas de los críticos que sí influyen respecto a la exposición, la galerista asume como propuesta innata ese ojo que sabe mirar, y Marga Carnero, en su Galería Ármaga en la calle Alfonso VI lo tiene presente desde hace más de 18 años.
Años de recorrido compartiendo la poesía y la melancolía de las obras de arte de un buen montón de artistas multidisciplinares que utilizan ese espacio creativo. Se vincula directamente al lugar, al entorno en el que el arte se socializa, la exposición. Más aún, las exposiciones de arte, las buenas exposiciones, se convierten en constantes revisiones de la historia del arte desde los sucesivos presentes, con lo que su misión parece albergar nuevos prismas. Prismas artísticos, pero también culturales, sociales e ideológicos, y aquí Ármaga tiene mucho que decir, mucho que contar, pero lo hace desde la mesura del silencio y la muestra de esas grandes obras de arte. Más de 300 artistas en su mirada, muchas obras llenas de sensibilidad, color, ese aroma que engancha a las paredes y las realza con su coraje contemporáneo para la contemplación de la vida.
Una gran diversidad de propuestas artístico-culturales configura el mundo del arte. Un recorrido por la nueva escena son propuestas dinámicas de trabajos interdisciplinarios y flexibles, priorizando la labor de crear una afición y fomentar el coleccionismo. Aunque cada espacio presenta particularidades únicas y originales que a veces son determinadas por condiciones físicas y disponibilidad de recursos, y otras por el concepto que se pretende llevar adelante, algunos puntos en común caracterizan a estas nuevas iniciativas; y ahí es donde pone todo el corazón Ármaga, decidir para cambiar las cosas, transitar por una especie de lluvia fina en materia de nuevas propuestas. Algunas experiencias aisladas, todas ellas hoy son referentes obligados para las nuevas generaciones de gestores culturales.
Durante años no era posible vislumbrar la constitución de un circuito de galerías de arte y espacios de exhibición como el que es posible en la actualidad. La necesidad de abrir espacios para jóvenes artistas es una constante en el discurso de Ármaga, sabedoras que los nuevos creadores no cuentan con lugares para exhibir sus obras y generalmente quedan fuera de los circuitos tradicionales. Marga Carnero, directora de Ármaga, coordina su espacio de una manera tan inusual, que las obras de gente joven tienen en su galería ese espacio tan lleno de vocación. Éstas son alternativas que buscan mantener un gran profesionalismo y cuidado en infraestructura y difusión. Y en ese espacio la economía de la amistad pareciera ser uno de los motores de estas propuestas, es decir, proyectos que se gestan entre amigos apostando al intercambio de capitales, conocimientos y capacidades entre artistas y la galerista. En este sentido, las relaciones se van construyendo como una red de trabajo equitativa y abierta…
El perfil de la galería es promover un arte joven, no necesariamente porque el artista sea joven, sino por el contenido nuevo, refrescante y positivo de su discurso, y así se afianza una de las propuestas de Ármaga. Te puedes suscribir al Club Ármaga por una pequeña cuota mensual, a partir de 30 euros y poder adquirir obras de arte a pago aplazado sin intereses de ningún tipo. Ármaga y su directora, Marga Carnero, lo tienen claro, “la idea es vivir en lo que nos gusta”, esta profesión vinculada al arte en todas sus dimensiones y la comunicación en el ámbito cultural; y así lo lleva haciendo desde hace muchos años. Y si les apetece pueden echar un ojo a su blog artearmaga.wordpress.com, y déjense aconsejar por estas grandes profesionales del arte en León; su corazón artístico lo agradecerá.